Hasta la fecha, Citroen ha ganado las pruebas del WRC de Méjico, Portugal, Jordania e Italia gracias a las victorias de sus pilotos Sebastien Loeb y Sebastien Ogier. Además, desde 2004 han sido imbatidos en la prueba de América del Sur.
Pero tras la incorporación de zonas de asfalto en el itinerario del primer y el segundo día, Citroen ha hecho lo mismo que su rival Ford, y su DS3 WRC usará los Michelin Latitude Cross blandos para evaluar cómo funciona el coche sobre esta superficie.
“Realizamos un test la semana pasada para comprobar el comportamiento del coche sobre asfalto,” comentó el siete veces campeón del mundo Loeb. “Con una especial a disputar de 20 kilómetros el viernes y otra de 14 el sábado, abas a disputar dos veces, el 20% del trazado a cubrir fue sobre asfalto. “Las secciones de asfalto están en medio de las de tierra, por lo que no nos la podemos jugar con la puesta a punto. Tendremos que adaptar nuestro pilotaje para poder sacar lo mejor de ellas, y lo primordial será cuidar muy bien los neumáticos.”
Teniendo en cuenta los resultados de las últimas cuatro pruebas, Loeb y su copiloto Daniel Elena creen que su coche parte con una ligera ventaja respecto los Ford Fiesta RS WRC.
“Es una buena señal ver que los Citroën DS3 WRC tienen una cierta ventaja sobre tierra, pero las diferencias son mínimas al final de cada rallye,” admite Loeb. “Deberemos ser rápidos desde el principio y darlo todo hasta al final, ya que empezamos el domingo con una especial de 48 kilómetros, y no podemos disminuir el ritmo.”
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